Jeep ha tenido buen nombre que a atraído a millones de compradores. Pero su buen nombre no lo ayuda en la mala fiabilidad de sus vehículos que constantemente deben de ser llamados a retiros.
Esta vez, Jeep ha retirado del mercado 42,887 de sus vehículos, incluidos el Wrangler del 2018 a 2021 y el Gladiator del 2020-2021 con transmisión manual.
La placa de presión del embrague de estos vehículos puede sobrecalentarse y romperse, lo que aumenta el riesgo de incendio.
La placa de presión del embrague, que transfiere potencia al embrague, puede sobrecalentarse como resultado de la fricción y luego fracturarse, lo que en última instancia conduce a la posibilidad de que la caja de la transmisión se agriete y expulse residuos calientes. Esto podría provocar un incendio.
Jeep dijo en una presentación ante la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) que esto no es el resultado de una pieza defectuosa.
La automotriz alega que es un problema de diseño y se solucionará con un nuevo software, para reducir el par del motor cuando la temperatura del conjunto del embrague aumente demasiado.
Los conductores pueden oler un olor a quemado antes de que falle, si el problema se desarrolla en uno de los vehículos afectados.
Jeep dice que tiene conocimiento de un accidente y no hay heridos como resultado de esas piezas defectuosas.
Los propietarios de Jeep Wrangler y Gladiator de esos años de modelo pueden consultar el sitio web de retiros del mercado de la NHTSA para ver si su vehículo está incluido.